Hace unas semanas me encargaron pintar una serie de dragones para el juego Dragones y Mazmorras.
¿Dificultad?
Yo no había pintado nada tan grande y tan espectacular visualmente. así que fui a la aventura.
¿Cuál es mi principal problema a la hora de pintar minis?
No se me da nada bien utilizar tintas o aplicar la técnica de pincel seco. En la primera, porque no sé porqué se me queda embadurnada la tinta y no se mete en las rendijas donde debería estar; en la segunda, porque no sé secar el pincel o alguna extraña razón dentro de mí no tiene la capacidad de utilizara bien la técnica (disaster).
Total, que mi primer reto fue el dragón negro de D&D. En la foto que me enviaron (una ilustración), aparecía con luces en negro y verde. Allá que fui a intentar replicar (sabiendo que para mí el término "replicar" no es más que empeorar el diseño de muestra XD).
¿El resultado?
Bueno, aunque podría haber quedado muuuuuucho mejor, quedó mejor de lo que esperaba, sobre todo por las complicaciones que he mencionado.
Pero al pintar el segundo dragón, el dragón rojo, me di cuenta de que para que el pincel seco quede bien no hay que apretar el pincel, jajajajaja, sino simplemente "acariciar".
Muchos pensaréis que es muy sencillo y para todas las manos, pero ya os digo que a mí se me atravesó (jajajajajaja).
Os dejo resultados de mi dragón rojo.
Y para acabar, quería decir a todo el mundo que por mucho que algo se nos atragante, no debemos abandonarlo o darlo por perdido, ya que al final, y con práctica, todo se aprende y todo llega.
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